14 de noviembre de 2025.- La Confederación Hidrográfica del Júcar, O.A. (CHJ) ha puesto en marcha, desde el pasado 1 de septiembre de 2025, el proyecto de “Adecuación de la Capacidad de Desagüe de los Encauzamientos Palmaret Alto y Palmaret Bajo", en la provincia de Valencia; un proyecto cuya finalidad es mejorar la capacidad hidráulica de los citados encauzamientos, que confluyen en el barranco del Carraixet, mediante labores de limpieza, adecuación y mantenimiento.
Esta importante actuación cuenta con un presupuesto de casi un millón de euros y un plazo de ejecución de 18 meses, y abarca aproximadamente 6 km de cauce: 3,8 km en el Palmaret Alto, a su paso por los términos municipales de Valencia (Massarrojos), Moncada y Alfara del Patriarca; y 2,3 km en el Palmaret Bajo, discurriendo por las pedanías de Borbotó y Carpesa del municipio de València, así como por Alfara del Patriarca y Tavernes Blanques.
Trabajos en el encauzamiento del Palmaret
Los trabajos consisten en: la retirada de arrastres y vegetación obstructiva en el cauce y sus márgenes; la tala del arbolado que dificulta el flujo del agua; la reparación de accesos deteriorados y la sustitución o reposición de ciertos elementos de seguridad como señalización, barreras metálicas y talanqueras; así como en el control de la vegetación oclusiva.
Las labores dieron comienzo en el Palmaret Bajo, donde ya se ha intervenido en un tramo de más de un kilómetro, entre la carretera Benifaraig-Moncada y el camino Carpesa-Moncada. Hasta el momento, se ha realizado el desbroce selectivo de especies vegetales no arbóreas sobre una superficie de más de 20.000 m², así como el apeo de más de 100 ejemplares de vegetación arbórea y poda de más de 50 ejemplares presentes en el cauce.
Además, se está instalando coberturas opacas de geotextil de polipropileno en algunos tramos con el fin de eliminar la presencia de Arundo donax o caña común en las márgenes del cauce, una vez desbrozada y triturada la parte aérea de esta especie exótica invasora. Estas cubiertas permanecerán sobre el terreno al menos durante 18 meses, lo que permitirá agotar el rizoma de la caña para que la planta no vuelva a crecer. Transcurrido este tiempo, se procederá a retirar el geotextil y, tras la adecuación del terreno, se irán realizando de forma periódica plantaciones de especies autóctonas de ribera.
Acerca de la eliminación de la vegetación en los cauces y las medidas de protección ante inundaciones
Esta actuación en el Palmaret Alto y Bajo parte del compromiso de la CHJ con la mejora de la seguridad hidráulica y la conservación medioambiental en la cuenca del Júcar, y tiene como objetivo principal el óptimo acondicionamiento de estos tramos encauzados que confluyen en el barranco del Carraixet.
A este respecto, el Organismo no quiere dejar de señalar que la vegetación presente en el cauce del Carraixet no afecta a la seguridad frente a avenidas, ya que dispone de capacidad suficiente para evacuar caudales en episodios de lluvia. Esto es así porque, en cualquier caso, la eliminación generalizada de la vegetación en los cauces ni minimiza el riesgo (al contrario, lo agrava) ni es una medida contemplada en el Plan de Gestión del Riesgo de Inundación.
En unos cauces sin vegetación, la velocidad que podría alcanzar el agua en caso de avenida sería enorme y los daños de las inundaciones se multiplicarían. La vegetación, además de ser un elemento natural en los cauces, tiene sus funciones y entre ellas está la laminación de avenidas, porque reduce la velocidad del agua y aumenta su nivel, con lo que se producen desbordamientos en varios puntos del cauce y reparte el flujo desbordado en superficies más grandes de la cuenca fluvial.
En el caso de que no existiera vegetación, el agua aumentaría de velocidad y produciría desbordamientos más agresivos, produciendo daños devastadores en municipios situados aguas abajo. Además, la presencia de vegetación aumenta la infiltración en el terreno y disminuye la erosión de las riberas de los cauces.
Desde el Organismo se recuerda que los trabajos de mantenimiento y conservación de cauces, así como las actuaciones de restauración fluvial, deben de seguir respetando las características naturales de los mismos. Por tanto, por criterios técnicos, no se contempla eliminar la vegetación de los cauces de forma indiscriminada porque las consecuencias serían mucho peores.
La CHJ reafirma su compromiso de trabajar con rigor técnico y en colaboración con las administraciones locales para garantizar la seguridad de la población y, al mismo tiempo, preservar los valores ambientales del barranco del Carraixet.